¿Te encuentras lidiando con el pico de frustración o el desborde de tu hijo-hija de forma constante? Es normal: las infancias de 3 a 7 años sientan emociones gigantescas, pero sus herramientas para manejarlas son aún pequeñas. Los gritos y castigos no funcionan,se necesita un enfoque de disciplina positiva.
La solución está en convertir el aprendizaje emocional en un juego de gestión emocional. Te mostraremos cómo usar la metodología del Mindfulness para que aprendan a reconocer sus sentimientos y a volver a la calma.
Aquí encontrarás 5 juegos de gestión emocional concretos, lúdicos y efectivos que transformarán las crisis emocionales infantiles en momentos de crecimiento.
Enfoque Educativo: Explica brevemente la diferencia entre el "cerebro emocional" (reactivo) y el "cerebro pensante" (lógico). En una crisis emocional, el niño está secuestrado por su emoción.
El Rol del Juego: Los juegos de gestión emocional basados en Mindfulness no buscan evitar la emoción, sino enseñar a hacer una pausa entre el sentir y el reaccionar. Es la base de la educación emocional.
Enseñanza: Ver cómo la calma llega lentamente.
Instrucción: Necesitas un tarro con agua, pegamento de glitter y mucha brillantina. Cuando el niño esté en un desborde, dile que sacuda el tarro. Mientras mira cómo el glitter cae lentamente, debe respirar y entender que su mente, al igual que la brillantina, necesita tiempo para asentarse.
Enseñanza: Controlar la exhalación para activar la calma.
Instrucción: El niño se sienta, cierra los ojos y se tapa los oídos con los dedos. Al exhalar, debe hacer un zumbido largo y continuo como una abeja: "Mmmmmm...". La vibración interna y el bloqueo del sonido externo ayudan a una concentración profunda (Mindfulness para niños).
Enseñanza: Nombrar y ubicar la emoción en el cuerpo.
Instrucción: Pídele que sea un detective de su cuerpo. Pregúntale: "¿Dónde está el enfado? ¿Está en tus puños apretados? ¿En una patada invisible en tu estómago?" Al nombrar el lugar, el niño separa la emoción de su identidad y aprende a enfocar la atención.
Enseñanza: Estrategia de disciplina positiva para la acción.
Instrucción: Dibuja o usa un semáforo. Rojo (Parar): Me siento enojado/triste/frustrado. Amarillo (Pensar): Respiro 3 veces. ¿Qué necesito? Verde (Actuar): Pido ayuda o uso una actividad de relajación.
Enseñanza: Liberación física de la tensión antes de la calma.
Instrucción: Cuando el pico de frustración pasa, pídele que tense todos sus músculos (como una roca dura) y luego se suelte de golpe, como un muñeco de trapo flácido. Esta técnica de tensión-relajación facilita la liberación y el paso a la calma.
Dejar atrás el ciclo de la crisis emocional y el castigo no es algo inalcanzable. Con estos 5 juegos de gestión emocional, has aprendido a dotar a tu hij@ de algo mucho más valioso: la conciencia emocional. La disciplina positiva no se trata de evitar el conflicto, sino de usar esos momentos de desborde como la oportunidad perfecta para la educación emocional. Tú eres el guía y el juego es tu herramienta.
Estos 5 juegos son el inicio de un cambio profundo, pero la verdadera maestría emocional requiere un plan de juego consistente.
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