Cuentos y Posturas: "Integrando el Yoga en la Rutina Nocturna para Mejorar el Sueño Infantil".

Transforma la hora de acostarse con el Yoga. Descubre secuencias de Yoga para infacias y ejercicios de respiración que garantizan un descanso profundo y fortalecen la conexión padre/madre-hijo/hija.

La dificultad para conciliar el sueño o lograr un profundo descanso infantil es una de las mayores frustraciones para las familias. Las mentes de los niños están llenas de la energía y de los estímulos del día.

Te presentamos el Yoga Narrativo para Dormir, una herramienta que combina la relajación física de las posturas con el poder tranquilizador de un cuento. Esta estrategia transforma la rutina nocturna infantil en un momento de paz y conexión con tu niño/niña.

En este post, descubrirás una secuencia sencilla y un ejercicio de respiración esencial para que tu niñ@ recupere la calma y se entregue al sueño.

💤 El Viaje a la Tierra de los Sueños: Cuento y Posturas

El secreto del Yoga Narrativo es la lentitud, voz suave y la inmersión en la historia. Esta secuencia de cinco posturas imita una aventura corta y de baja intensidad que culmina en el refugio del sueño. Vamos a hacer un pequeño viaje desde la habitación hasta la Tierra de los Sueños, donde todo es suave y tranquilo. ¿Me acompañas?

1. La Montaña Estable

"Primero, vamos a sentarnos cómodamente, como una Montaña Estable. Queremos ser muy fuertes y dejar que toda la energía que usamos hoy (correr, saltar, reír) se caiga por nuestros pies y se vaya por el suelo. Cerramos nuestros ojos un momento... y respiramos profundamente, sintiendo cómo nos volvemos muy, muy tranquilos."

(Postura: Sentarse con las piernas cruzadas o extendidas. Manos en las rodillas. Respiración lenta y profunda 3 veces.)

2. El Sol se Esconde

"El día ya se va. Vamos a ayudar al Sol a irse a dormir. Estiramos nuestros brazos muy, muy alto, como si quisiéramos tocar el cielo (Inhalamos). Y ahora, lentamente, el Sol baja y baja, y nos doblamos hacia adelante, dejando caer la cabeza (Exhalamos). Lo hacemos una vez más, muy despacio, saludando al Sol que se va para que mañana pueda volver a brillar."

(Postura: Desde la Montaña (sentado), elevar los brazos y doblar el torso suavemente hacia adelante, acompasando el movimiento con la respiración lenta.)

3. El Gato que se Estira

"Ahora que el Sol se fue, entramos a un jardín muy silencioso. Vemos un gatito que está listo para dormir. Nos ponemos a cuatro patas. Primero, el gatito se estira y arquea su espalda hacia el cielo (Exhalamos, mirando el ombligo). Luego, relaja su barriguita y mira hacia adelante (Inhalamos). 

(Postura: movimiento lento y fluido, coordinado con la respiración. Repetir 3-4 veces.)

4. El Bebé Feliz

"El gatito se ha quedado dormido. ¡Qué calma! Ahora, nosotros nos acostamos boca arriba y nos convertimos en el Bebé Feliz."

"Agarramos nuestros pies o tobillos y nos mecemos muy despacito de un lado a otro. El suelo nos da un suave masaje en la espalda. Estamos tan contentos y tranquilos que solo queremos sentir el abrazo de nuestra propia calma."

(Postura: acostarse boca arriba, rodillas flexionadas cerca del pecho, agarrar los pies por el borde exterior. Balancearse suavemente.)

5. El Abrazo del Oso

"Ya casi llegamos a la Tierra de los Sueños. Nos damos un último abrazo, el Abrazo del Oso, la postura más calentita de todas. Nos ponemos de rodillas, doblamos el cuerpo hacia adelante y apoyamos la frente en el suelo."

"En esta postura, nuestro cuerpo se siente seguro y muy arropado. Es como si una gran manta suave nos cubriera. Nos quedamos aquí un momento, sintiendo la calma en todo nuestro cuerpo."

(Postura: rodillas en el suelo, torso doblado sobre las piernas, brazos extendidos o relajados a los lados. Mantener la postura 5-10 respiraciones lentas.)

La Clave: La Respiración de la Vela

Esta técnica es un ancla mental poderosa y el punto culminante de la rutina nocturna infantil .

¿Cómo se practica?

1. Preparación: El niño/niña debe estar acostado o aún en la postura del Abrazo del Oso. Pídele que ponga una mano sobre su barriga.

2. Visualización: Dile: "Imagina que tienes una pequeña vela encendida. No queremos que se apague, solo que la llama se mueve con mucha suavidad."

3. El Acto: Inhala profundamente por la nariz (la barriga se infla como un globo) y ahora, exhala por la boca muy lenta y largamente , como soplando esa vela con dulzura.

Al alargar la exhalación, el niño/niña alarga el periodo de activación del freno interno, preparando el terreno para el sueño. Es un juego sencillo que fomenta la conexión y el control emocional, garantizando que el cuerpo y la mente entren en modo descanso profundo .

Hemos completado nuestro viaje a la calma. Al incorporar el Yoga Narrativo en la rutina nocturna infantil, no solo estás ayudando a tu hijo a conseguir un descanso profundo infantil, sino que estás creando un ritual sagrado de conexión. Estos minutos de yoga para dormir se convierten en un ancla de paz al final del día, enseñando a tu hijo/hija el valor de la relajación consciente.

Recuerda: la paciencia y la constancia son la clave. Si la primera noche no funciona, simplemente inténtalo de nuevo mañana.

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